A finales de agosto Corea del Sur daba un puñetazo sobre la mesa con la aprobación de la llamada ley «anti-Google». La Telecommunications Business Act es la primera gran ley en poner fin a una de las prácticas que más polémica ha generado en estos últimos años: que Apple y Google obliguen a usar sus sistemas de pagos en sus tiendas de apps para cobrar comisiones de hasta el 30%.
Con esta ley sobre la mesa, Apple y Google se ven obligadas a implementar sistemas de pagos alternativos y Google ya ha movido ficha. Tal y como ha anunciado Google Corea, la compañía va a dar a los desarrolladores la opción de añadir sistemas de pagos in-app alternativos junto, por supuesto, al sistema de facturación de Google Play.
Google no se va, solo se echa a un lado
Desde Google explican que en respuesta a la recientemente aprobada ley, «los desarrolladores podrán añadir un sistema alternativo de facturación dentro de la aplicación, junto con el sistema de facturación de Google Play, para sus usuarios de móviles y tabletas en Corea del Sur». Así pues, serán los usuarios los que podrán elegir qué sistema usar en el momento de la compra.
Google ha defendido su sistema, alegando que «es posible que los sistemas de facturación alternativos no ofrezcan las mismas protecciones u opciones de pago y funciones del sistema de facturación de Google Play», en referencia a sistemas como el control parental, los métodos de pago familiares, la gestión de suscripciones o las tarjetas de regalo de Google Play.
Se dará más información en los próximos meses para que los desarrolladores sepan cómo implementar estos sistemas. La compañía, sin embargo, ha querido dejar claro que el sistema de facturación de Google Play seguirá estando presente, en tanto que «al igual que a los desarrolladores les cuesta dinero crear una aplicación, a nosotros nos cuesta construir y mantener un sistema operativo y una tienda de aplicaciones que permita a los consumidores acceder a esas aplicaciones de forma fácil y segura».
Las comisiones de Google Play Store sirven para cubrir algo más que el proceso de pago, incluyendo el desarrollo de Android y la tienda de apps, nuevas plataformas basadas en Android, la seguridad, la distribución de las apps y las herramientas de desarrolladores. Sin embargo, no son la única fuente de ingresos de la tienda, ya que en Google Play también hay publicidad, por ejemplo.
Cabe destacar que las aplicaciones que se distribuyan a través de Google Play y usen un sistema de factoración alternativa seguirán sometidas a una tarifa de servicio. Esta estará basada en «las ventas digitales en la plataforma» pero Google, que dice que los desarrolladores «incurrirán en costes para apoyar su sistema de facturación», les reducirá la tarifa del servicio en un 4%. En palabras de Google:
«Por ejemplo, para la gran mayoría de los desarrolladores que pagan un 15% por las transacciones a través del sistema de facturación de Google Play, su tarifa de servicio por las transacciones a través del sistema de facturación alternativo sería del 11%. Como otro ejemplo, ciertas categorías de aplicaciones que participan en nuestro programa Media Experience, como un proveedor de libros electrónicos, pagarán una tarifa de servicio del 10% por las transacciones realizadas a través del sistema de facturación de Google Play, pero sólo un 6% por las transacciones en un sistema alternativo».
Según Google, «el 97% de los desarrolladores no venden contenidos digitales y no están sujetos a ninguna tasa de servicio por tener sus aplicaciones en Play Store»
Fuente: https://www.xataka.com