Sabíamos que tarde o temprano llegaría este momento, la compañía de Mountain View nos venía advirtiendo desde hace meses, incluso con mensajes dentro de la aplicación. Desde ayer, Android Auto en la pantalla del móvil deja de estar disponible, por lo que se nos invita a usar el modo de conducción de Google Assistant. ¿El problema? Se trata de un sustituto que no está al alcance de todos.
Como explican nuestros compañeros de Xataka Android, la decisión de apostar todo por el nuevo modo de conducción integrado en Google Maps perjudica principalmente a quienes tienen teléfonos móviles antiguos o viven en regiones donde el sustituto de Android Auto en la pantalla del teléfono no está disponible. Veamos de qué se trata todo esto y cuáles son los nuevos requisitos para usarlo.
Adiós a Android Auto en la pantalla del coche
Si eres uno de los usuarios que seguía usando Android Auto desde el móvil, al abrir la aplicación te encontrarás con un mensaje que indica que ya no se encuentra disponible. En caso de que tengas un coche compatible, al conectar el móvil, podrás seguir usando Android Auto. Todo seguirá funcionando como antes, solo que desde la pantalla del vehículo.
¿Y si no tienes un coche compatible con Android Auto? Aquí es donde entra en juego el nuevo modo de conducción de Google Assistant, un sustituto que nos brinda una experiencia de conducción básica en la pantalla de nuestro teléfono. Para usarlo, tendrás que iniciar la navegación hacia un destino en Google Maps, es decir, no tendrás una aplicación dedicada con un icono de acceso directo.
Pero hay un problema con este nuevo modo de conducción. Como mencionamos arriba, no está disponible para todos los usuarios. Mientras que Android Auto funciona desde Android 6.0 en adelante, el modo de conducción de Google Assistant necesita Android 9.0 o superior. Y, por si eso fuera poco, requiere que el móvil tenga un mínimo de 4 GB de memoria RAM.
Además tenemos limitaciones por regiones. Google ha establecido que el sustituto de Android Auto para la pantalla del móvil solo esté disponible en unos pocos países: Alemania, Australia, Canadá, España, Estados Unidos, Francia, India, Italia, México o Reino Unido. Esto, sumado a los nuevos requisitos, se traduce en que muchos usuarios se quedarán sin alternativas.
Paralelamente, Google está trabajando en una apuesta más ambiciosa. Esta se llama Android Automotive, y es un sistema operativo completo e independiente que no depende el teléfono móvil, sino que se ejecuta directamente desde el coche. Aún habrá que esperar para que se popularice, pero por lo pronto está siendo implementada en algunos coches, entre ellos, el nuevo Polestar 2.
Fuente: https://www.xataka.com